Algo de razón tiene Schuster

Si hay algo que le ha gustado siempre y le sigue gustando a Bernd Schuster es meterse en camisa de once varas. Lo hacía en Levante y lo hizo en Getafe: a Bernardo le gusta dar caña a la Prensa, meterse en líos innecesarios, hacer declaraciones jugosas con las que así poder criticarle. Él parece que lo busque y lo consigue. Estos días los columnistas de los diferentes periódicos han tenido de qué hablar gracias al nuevo estilo tenístico que el técnico blanco aseguró que tiene el Real Madrid.

Han bastado 24 horas para darle la razón al alemán. El Real Madrid no encuentra un modo refinado de fútbol, no es, ni de lejos, lo contrario al Madrid de Capello. Sin embargo, a estas alturas, ha conseguido mejores resultados que el italiano. Salvando la Supercopa de España, los madridistas, que comenzaron gustando en sus dos primeros partidos ligueros, han ido bajando el listón en cuanto a espectacularidad y juego preciosista, pero ha sabido resolver y aparecer cuando más falta hacía.

Ayer contra el Valencia el Madrid fue un vendaval. Quizá benefició el estado lunático de un rival sin entrenador y en pleno estado de crisis, pero meter cinco goles en Mestalla, alguno de ellos de muy bella factura como el de Raúl, Van Nistelrooy o Sergio Ramos da, u obliga a dar, algo de razón a Schuster y su teoría tenística. Costará que alguien lo haga, porque la gracia se ha convertido en criticar. Se critica hasta cuando uno es líder y hasta cuando el resultado es favorable. Parece como si hubiese que buscar a todo lo negativo en lugar de disfrutar de cinco goles al más puro estilo Federer.