Sentimientos contrapuestos

"¡Qué pasada!", "menuda mierda", "¡qué pena!"... son algunas de las frases que seguramente más se repitieron anoche al término de la fatídica penúltima jornada de Liga que deja las cosas tal y como estaban pero con tan sólo una jornada menos por delante. Sentimientos contrapuestos que dejan patente la emoción de un campeonato al que sólo le quedan noventa minutos de juego.

Van Nistelrooy ilusionó a sus compañeros, Tamudo dejó mudo el Camp Nou y desató la locura en Zaragoza y en Mallorca el Sevilla dejaba escapar la oportunidad de ser líder tras los tropiezos de Madrid y Barça.

Lo que no entiendo es como ni Madrid ni Barça pudieron ganar. Ni el Sevilla. Un equipo que sabe que ganando tiene la Liga en la mano no entiendo como puede empatar, a dejarse marcar un gol en el último minuto, o no pasar del empate ante un equipo que no se juega nada. No sé como los futbolistas no salen a muerte.

Pero bueno. Queda una jornada y vaticino un campeón que casi lo es: el Real Madrid. Porque ahora sí, en casa y ante un Mallorca que no se juega nada de nada no creo que dejen escapar la posibilidad de ser campeones. El Barça también ganará y se escuchará eso de "qué lástima, hemos ganado pero los resultados no han acompañado", cuando era ayer el momento de no fallar. Al Sevilla sólo le queda esperar otra carambola que, visto lo visto, puede pasar.

Una Liga que ni Madrid ni Barça ni Sevilla parecen querer ganarla, aunque eso sí, quien menos la ha querido y quien más la ha ninguneado ha sido el Barça. Queda otra jornada, ¿será tan intensa?

Foto | uefa.com